Los contratos de franquicia permiten al franquiciado iniciar una actividad mercantil con una inversión ajustada y con el soporte de un modelo de negocio que a priori ya ha sido contrastado. Por ello es una buena opción que hay que tener en cuenta. Garantice siempre sus derechos contando con el asesoramiento de abogados expertos en derecho mercantil.
El contrato de franquicia es aquel documento por el cual el franquiciador y franquiciado suscriben el acuerdo de franquicia. En esta relación serán de especial importancia tres conceptos:
- La marca: La denominación que permite identificar el producto en el mercado.
- El Know-How: La trasmisión al franquiciado del conjunto de conocimientos que permiten la explotación del proceso productivo de forma satisfactoria.
- El apoyo continuado: El franquiciador establece los vehículos e instrumentos necesarios para apoyar al franquiciado en las diferentes vicisitudes que puedan asaltarle en el desarrollo de su actividad.
Además respecto de los partícipes en la sociedad franquiciada puede ser muy interesante contar con un pacto de socios que desarrolle las obligaciones mutuas asumidas por cada uno de los patícpipes.

Dejar un comentario